Situación, avances y desafíos en el Día Mundial de Respuesta al VIH-SIDA: “Sigamos el camino de los derechos”

Situación, avances y desafíos en el Día Mundial de Respuesta al

VIH-SIDA: “Sigamos el camino de los derechos”

El 1º de diciembre de todos los años se conmemora el Día Mundial de Respuesta al VIH-SIDA, una oportunidad para reflexionar sobre los avances y desafíos en la respuesta al Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH). Según informes de OPS, en América Latina el número de muertes relacionadas con el SIDA ha disminuido 28% entre 2010 y 2023, mientras que en el Caribe la reducción fue del 57%. Sin embargo, las nuevas infecciones por VIH muestran tendencias diferentes en este período: en América Latina, los nuevos casos aumentaron 9%, alcanzando aproximadamente 120.000 infecciones en 2023, mientras que en el Caribe, las infecciones disminuyeron 22%, sumando 15.000 casos.

El VIH/SIDA es una de las más de 30 enfermedades transmisibles y condiciones relacionadas que la OPS busca eliminar para 2030 como parte de su Iniciativa de Eliminación. Uruguay viene implementando desde hace años la iniciativa ETMI-plus que tiene por objetivo lograr y mantener la eliminación de la transmisión materno infantil de la infección por el VIH, la sífilis, la enfermedad de Chagas y la infección perinatal por el virus de la hepatitis B como problemas que constituyen un peligro para la salud pública. A las medidas establecidas hace tiempo para avanzar hacia la eliminación, se sumó en el año 2018 la Ordenanza 1119 que establece entre otras cosas que:

-Se debe ofrecer la prueba diagnóstica de sífilis y VIH a la pareja de la mujer embarazada al menos una vez en el embarazo, independientemente del resultado en la mujer. En caso de que el prestador de salud de la pareja sea diferente al de la gestante, serán los mismos prestadores de salud quienes establecerán la modalidad de acceso a la prueba de diagnóstico.

-También se debe solicitar prueba diagnóstica de VIH (de laboratorio o rápida) entre los tres y seis meses del puerperio de aquellas mujeres que están en período de lactancia.

-La prueba diagnóstica de VIH se debe realizar según las recomendaciones de consejería y diagnóstico de VIH del Ministerio de Salud Pública y la Ordenanza 567 del 19 de setiembre de 2014.

La epidemiología de la infección por el VIH en la edad pediátrica clásicamente reconocía a la transmisión vertical (TV) como su principal vía de transmisión. Por lo tanto, desde el inicio de esta pandemia, las estrategias mundiales han sido enfocadas en la planificación y adecuado control del embarazo, el diagnóstico materno precoz, tratamiento oportuno de la madre con VIH, inhibir la lactancia materna, administrar profilaxis y continuar el seguimiento del recién nacido expuesto.

 

 

Estas estrategias han hecho posible que Uruguay, desde el año 2015, mantenga cifras de eliminación de la TV del VIH (< 2%) en todo el territorio nacional, logrando una de las metas establecidas por la Organización Mundial de la Salud. En el último informe elaborado por el Área Programática ITS-VIH/SIDA que está siendo comunicado en estos días por el Ministerio de Salud Pública, se constata que Uruguay continúa manteniendo esa tasa de transmisión vertical en rango de eliminación de OMS, por debajo del 2%.

En ese informe, se comunica que en 2023 nacieron 86 niños hijos de madres VIH +. 68 de ellas recibieron terapia antirretroviral antes del embarazo actual y ningún niño se infectó durante el embarazo o parto. No obstante, se identificaron 3 casos en que la vía de transmisión fue la lactancia, desde madres que se infectaron durante el amamantamiento. La primoinfección materna es un período de alta carga viral, por lo que en estos casos el riesgo de contagio es alto. Esto implica que actualmente la transmisión durante la lactancia sea la principal vía de transmisión en la edad pediátrica.

A su vez, en el correr del año 2024 (por tanto, aún no incluido en el informe MSP), se han diagnosticado algunos casos adquiridos por transmisión sexual en adolescentes.

Por todo esto, los pediatras y todos los médicos que asistimos niños, niñas y adolescentes tenemos el desafío de seguir trabajando en la prevención para poder lograr la eliminación definitiva de esta infección en la edad pediátrica, así como en el diagnóstico y tratamiento oportunos.

Para esto es fundamental:

-mantener las medidas de prevención contra la infección durante todo el período que dure la lactancia de las mujeres con test para VIH negativo durante el embarazo y parto.

-testear periódicamente a las madres que amamantan y a sus parejas sexuales (según dice la Ordenanza 1119, a los 3-6 meses y cada 3 meses mientras dure la lactancia).

-suspender la lactancia si la madre se diagnostica VIH positivo.

-administrar profilaxis post exposición al niño/a expuesto.

-no administrar la vacuna BCG en los niños expuestos hasta haber descartado la infección.

-mantener alto índice de sospecha frente a situaciones clínicas en niños y adolescentes que nos orienten al diagnóstico: presencia de síndrome poliadenomegálico, desnutrición o adelgazamiento, infecciones recurrentes en especial oportunistas, tuberculosis entre otros.

 

 

-ante el aumento de la violencia que vive nuestra sociedad, incluyendo la violencia sexual, siempre considerar riesgos y establecer las medidas tendientes a prevenir la posible transmisión en estos casos.

-continuar trabajando, en el marco de los derechos de niños, niñas y adolescentes, por el acceso universal y la promoción de la salud, y en contra de la discriminación que continúa acompañando a la infección por VIH.

La infección es prevenible, tratable e intransmisible por vía sexual si la persona con VIH tiene carga viral persistentemente indetectable.

Los objetivos mundiales de la OMS para 2030 son lograr 95 -95 -95 en el diagnóstico, tratamiento y carga viral indetectable respectivamente, llegar a menos de 200.000 nuevas infecciones y lograr cero discriminación. Por eso el lema de ONUSIDA para el día mundial del VIH/SIDA 2024 es: “Sigamos el camino de los derechos”.

Trabajar desde la sociedad toda en la discriminación cero es un punto clave si queremos lograr la eliminación de esta pandemia. La discriminación hace que las personas eviten el testeo, empeora la adherencia al tratamiento y la calidad de vida de quienes viven con VIH. La discriminación se mitiga con información y empatía.

Como pediatras, tenemos el privilegio y la oportunidad de poder trabajar en la promoción de una sexualidad saludable desde las primeras etapas de la niñez para lograr adolescentes empoderados en sus cuidados sin miedos ni estigmas.

 

Mónica Pujadas, Virginia González y Lorena Pardo

Comité de Infectología Pediátrica y Vacunas SUP

Centro de Referencia Materno Infantil de VIH del CHPR.

Diciembre, 2024